Colaborador del obispo en la predicación y en la administración de los sacramentos. Ejerce su ministerio en comunión con los demás presbíteros, bajo la autoridad del obispo. En el lenguaje común el término más usual para referirse a los presbíteros es Sacerdote (Youcat pág. 88)
- Padre Evaristo Sada, LC
- ¿Cuál es el mínimo de oración que debemos hacer cada día?
Conocí un matrimonio que ha formado una familia con 7 hijos. Ambos trabajan, tienen un buen grupo de amigos, cada año van de misiones en familia. El día de fin de año hicieron un balance de su vida matrimonial. Reconocieron que la relación se estaba enfriando. Se dedicaban a cuidar, educar y mantener a sus hijos, pero estaban descuidando su vida matrimonial . Decidieron poner los medios para asegurar al menos 15 minutos diarios de estar los dos juntos, totalmente el uno para el otro. Durante esos 15 minutos ponen una veladora a la puerta de su habitación y un letrero: “Tiempo para mamá y papá”. Los hijos saben que durante ese espacio no se les puede interrumpir.
- Silencios malos y silencios buenos I
Los silencios negativos
Hasta ahora hemos expuesto, lo que se podría llamar, la espiritualidad del silencio y, más importante aún, la pedagogía formativa para alcanzar esta virtud tan necesaria en la vida espiritual. En los siguientes capítulos expondremos algunos temas conclusivos sobre el silencio.
En la vida, también en la vida de la persona consagrada, hay muchos momentos de silencio. Pero no todos tienen la misma importancia y valor. Incluso algunos silencios pueden ser negativos y manifiestan falta de virtud.
- La presentación del Señor
"Los padres de Jesús lo llevaron a Jerusalén, para presentarlo al Señor, de acuerdo con lo escrito en la ley del Señor" (Lc 2, 22).
Cuarenta días después de la Navidad, la Iglesia revive hoy el misterio de la presentación de Jesús en el templo. Lo revive con el estupor de la Sagrada Familia de Nazaret, iluminada por la revelación plena de aquel "niño" que, como nos acaban de recordar la primera y la segunda lectura, es el juez escatológico prometido por los profetas (cf. Ml 3, 1-3), el "sumo sacerdote compasivo y fiel" que vino para "expiar los pecados del pueblo" (Hb 2, 17).
- Las partes de la misa: La consagraciA?n (Tercera parte)
Frutos de la unión con Cristo Eucaristía
En la consagración, al unirnos íntimamente a Cristo, se da como fruto, en primer lugar, nuestra santificación. En segundo lugar se da como fruto nuestra fecundidad. “El que permanece en mí y yo en él, ése da mucho fruto; porque separados de mí no podéis hacer nada” Jn 15, 5.