El corazón humano, siempre es pequeño, pronto lo acabamos de conocer. Pero Dios no es así, no lo acabamos de conocer nunca, nuestra intimidad no tiene límite.
El corazón humano, siempre es pequeño, pronto lo acabamos de conocer. Pero Dios no es así, no lo acabamos de conocer nunca, nuestra intimidad no tiene límite.