Jesús Eucaristía, mi Maestro

1935

«Paso cada momento libre a los pies de Dios escondido. Él es mi Maestro, le pregunto todo, con Él hablo de todo, de allí saco la fuerza y la luz, allí aprendo todo, de allí me llegan luces sobre el modo de comportarme con el prójimo. Desde el momento que salí del noviciado, me encerré en el tabernáculo con Jesús, mi Maestro. Él Mismo me atrajo a éste fuego de amor vivo, alrededor del cual se concentra todo.»