El mandato que el Hijo ha recibido del Padre es amarnos. Transmitiendo al Hijo su naturaleza, que es amor, el Padre le transmitió su pasión de amor y ella llevó a Jesús a la cruz.
El mandato que el Hijo ha recibido del Padre es amarnos. Transmitiendo al Hijo su naturaleza, que es amor, el Padre le transmitió su pasión de amor y ella llevó a Jesús a la cruz.