Navidad

1785
Navidad

¡Naciste por fin! ¡Supieras
cuánto te ansiaba mi alma!
Cuánto la gente sufría
antes de que Tú llegaras.
Cuánto la calle vacía
lloraba por tus pisadas,
cuánto la noche dormía
soñando que la despertabas,
cuánto las casas vecinas
de colores se adornaban
aguardando Tu venida
para ofrecerte posada.
¡Supieras, Dios, que te amamos!
Supieras que te añoraba…
supieras que no vivimos
si Tú no estás, si nos faltas.
No, no me llore mi Niño
cuando le pican las pajas,
cuando no halló un rinconcito
donde nacer…ni una casa.
Sabes, Señor, que en mi alma
todo fue como soñaba…