Oración 1:
“Dios mío: Gracias por conservarme la fe. Gracias por darme confianza. Gracias por enseñarme a amar. Termino este día con una alabanza: ¡A ti todo honor y gloria, mi Dios! Amén.”
Oración 2:
Señor: Como el niño que no sabe dormirse sin cogerse a la mano de su madre, así mi corazón viene a ponerse sobre tus manos, al caer la tarde. Amén.
Oración 3:
Dios mío: Como el niño que sabe que alguien vela su sueño de inocencia y esperanza, así descansará mi alma segura sabiendo que eres tú quien nos aguarda. Amén.