«Puedes hacer mil cursos de catequesis, mil cursos de espiritualidad, mil cursos de yoga, zen, y todas estas cosas. Pero todo esto nunca será capaz de darte la libertad de hijo. Sólo el Espíritu Santo es el que mueve tu corazón para decir ‘Padre’. ¿Sólo el Espíritu Santo es capaz de ahuyentar, para romper esta dureza de corazón y hacer un corazón… blando?… No sé, no me gusta la palabra… «Dócil». Dócil al Señor. Dócil a la libertad del amor».
Papa Francisco, homilía Santa Marta 9 Enero 2014