Invitemos a la Santísima Virgen a participar en nuestra Eucaristía. Pide que Ella se coloque entre Cristo y tú, para que le ahorre al Señor su “kenosis”. Sus manos y sus labios son los únicos inmaculados y puros.
Invitemos a la Santísima Virgen a participar en nuestra Eucaristía. Pide que Ella se coloque entre Cristo y tú, para que le ahorre al Señor su “kenosis”. Sus manos y sus labios son los únicos inmaculados y puros.